Una joven de 18 años, hija de una funcionaria judicial, fue demorada tras conducir a alta velocidad en el centro de la ciudad.
En la madrugada del domingo, personal del Grupo C.O.M.N-37 logró interceptar a una Toyota SW4 blanca que realizaba maniobras temerarias a alta velocidad en pleno centro de Presidencia Roque Sáenz Peña. La camioneta fue divisada por cámaras de seguridad en la intersección de calles 14 y 15, y finalmente detenida en calle 12 entre 3 y 5. El vehículo era conducido por Sofía L.P, de 18 años, hija de Pamela Michlig, fiscal auxiliar en la fiscalía a cargo de Carlos Amad. La situación derivó en el secuestro preventivo de la camioneta por conducción peligrosa.
La intervención no sólo generó inquietud por la reiteración de este tipo de maniobras en la ciudad, sino que se tornó especialmente polémica por la celeridad con la que fue restituido el vehículo. Según pudo saber N9, la camioneta fue entregada a la madre de la joven el mismo domingo, lo que despertó suspicacias y malestar en la comunidad. “La comunidad está muy, pero muy enojada con esta situación”, afirmó en diálogo con N9 la periodista Daniela Stoianoff. “Y además, la hija de una funcionaria pública debería dar el ejemplo, justamente”.
Si bien no se registraron heridos ni daños a bienes públicos, las imágenes difundidas muestran una conducción riesgosa en zonas de alta circulación peatonal y vehicular. En los videos también se observa que los patrulleros que cruzan a la camioneta no inician una persecución inmediata. Según la información que pudo reconstruir N9, la búsqueda del vehículo comenzó recién luego de una denuncia al 911 realizada por un vecino. “Por poco no fue una tragedia”, subrayó Stoianoff.
El secretario de Seguridad Vial, Rafael Acuña, fue el único funcionario que accedió a dialogar con este medio. Confirmó que se realizó el test de alcoholemia, el cual dio negativo, y que el vehículo fue puesto a disposición de la Justicia de Faltas Provincial. Sin embargo, cuestionó la decisión de restitución inmediata: “Toda la operatividad que hemos realizado cae en saco roto cuando suceden estas cuestiones. Creo que debería haber una medida ejemplificadora”.
La situación dejó en evidencia no sólo la peligrosidad de estas conductas, sino también la percepción de que ciertos sectores pueden sortear con facilidad los procedimientos habituales. Vecinos consultados por este medio manifestaron su indignación, señalando que a muchos ciudadanos les retienen motos o autos por días, con trámites complejos y multas elevadas. “La burocracia es para algunos o solamente para todos”, se preguntó Stoianoff al cierre del informe.
Por el momento, el caso fue caratulado como infracción a la normativa vial, sin consecuencias penales para la joven. No obstante, tanto autoridades como medios locales advirtieron que el caso sienta un precedente que requiere una respuesta clara de parte de la Justicia. El episodio vuelve a poner bajo la lupa no solo la problemática de las picadas ilegales en la ciudad termal, sino también la relación entre poder y acceso a privilegios dentro del sistema judicial chaqueño.
