El yoga, una disciplina milenaria que integra cuerpo y mente, ha ganado popularidad en el ámbito deportivo debido a sus múltiples beneficios para los atletas. En palabras de Roxana Pereyra, directora del Centro de Yoga Chaco y máster en yoga deportivo, "el yoga debería ser parte de la vida cotidiana, es parte de la vida misma. Aplicamos técnicas que sirven para cada actividad que realizamos, convirtiéndolo en un verdadero estilo de vida".
El yoga, una disciplina milenaria que integra cuerpo y mente, ha ganado popularidad en el ámbito deportivo debido a sus múltiples beneficios para los atletas. En palabras de Roxana Pereyra, directora del Centro de Yoga Chaco y máster en yoga deportivo, "el yoga debería ser parte de la vida cotidiana, es parte de la vida misma. Aplicamos técnicas que sirven para cada actividad que realizamos, convirtiéndolo en un verdadero estilo de vida".
El yoga deportivo, en particular, se enfoca en mejorar aspectos físicos claves como la fuerza, la flexibilidad y el equilibrio. "Durante las clases trabajamos con posturas estáticas y dinámicas, que incluyen lateralidades, retroflexiones y flexiones hacia adelante. Estas posturas ayudan a las personas a obtener bienestar físico, que es lo que muchos buscan hoy en día", explicó Pereyra.
El fortalecimiento muscular y la flexibilidad que se logran a través del yoga son esenciales para prevenir lesiones, ya que permiten al cuerpo adaptarse mejor a las exigencias físicas del deporte. Además, Pereyra destaca que "hay muchas técnicas de respiración y pranayama que ofrecen excelentes resultados tanto en el ámbito deportivo como en la vida cotidiana".
El impacto del yoga no se limita al cuerpo; también es una herramienta eficaz para combatir el estrés y mejorar la concentración. "El yoga tiene técnicas de atención y concentración que pueden utilizarse antes y después de una competición. Aunque no se recomienda meditar antes de un partido, estas técnicas son ideales para calmar la mente después de la actividad física", aseguró Pereyra.
En cuanto a los más jóvenes, la experta explicó que las técnicas de mindfulness son especialmente útiles para ayudar a los niños a gestionar sus emociones durante una competencia. "Con los niños trabajamos a modo de juego, ya que no deberían meditar, pero sí podemos aplicar pequeñas técnicas de concentración para que manejen la presión de la competencia", indicó.
El yoga deportivo, una modalidad que combina la disciplina del yoga con la competitividad, también tiene un lugar en la provincia del Chaco. "El yoga deportivo es considerado un deporte. Se realizan campeonatos a nivel nacional, internacional y provincial. Aquí en Chaco, organizamos eventos todos los meses, donde los participantes exhiben su arte y compiten", comentó Pereyra.
El centro de Yoga Chaco, ubicado en Arboy Blanco 175, ofrece clases durante todo el día con una variedad de técnicas y estilos. "Hay diferentes horarios para que todos puedan encontrar el momento adecuado para practicar, ya sea en la mañana, la siesta, la tarde o la noche", concluyó Pereyra, invitando a la comunidad a sumarse a esta disciplina que ofrece beneficios tanto físicos como mentales y espirituales.